El Lago Maldito: Una Historia de Terror en la Oscuridad de la Noche
Había un lago oscuro y misterioso en lo profundo del bosque, donde un grupo de amigos solía ir a acampar. Durante años, habían oído rumores de sucesos sobrenaturales en ese lugar, pero nunca les habían prestado atención. Sin embargo, una noche, todo cambió.
El grupo de amigos, compuesto por cinco personas, llegó al lago emocionado por su aventura de camping. Montaron sus tiendas de campaña y encendieron una fogata, pero pronto se dieron cuenta de que algo no estaba bien. El ambiente se volvió opresivo, y la sensación de que estaban siendo observados los invadió.
Una de las chicas, llamada Sara, necesitaba ir al baño y se alejó del campamento para buscar un lugar tranquilo. Se adentró en el espeso bosque y encontró un área apartada detrás de unos árboles. Mientras estaba agachada, escuchó risas siniestras que la hicieron estremecer. Miró a su alrededor, pero no vio a nadie.
De repente, Sara notó algo extraño en el agua del lago. Una figura borrosa emergió lentamente de las profundidades, con una piel pálida y ojos vacíos. El terror la paralizó mientras la figura se acercaba a ella con pasos arrastrados. Trató de gritar, pero su voz se atascó en su garganta.
Sara corrió hacia el campamento, pero se dio cuenta de que los demás también estaban en pánico. El ambiente se había vuelto aún más espeluznante, y escuchaban risas y susurros por todas partes. Intentaron huir, pero las sombras los rodeaban, impidiéndoles encontrar una salida.
En medio del caos, Sara notó que uno de sus amigos había desaparecido. Buscaron desesperadamente en la oscuridad, pero solo encontraron su linterna tirada en el suelo, emitiendo una luz parpadeante. El terror se apoderó de ellos mientras la risa siniestra resonaba en sus oídos.
Decidieron regresar al campamento para buscar una salida, pero se encontraron con una escena macabra. Los restos mutilados de su amigo desaparecido estaban colgados en los árboles, con una sonrisa grotesca en su rostro. Gritos desgarradores llenaron el aire cuando se dieron cuenta de que estaban atrapados en una pesadilla infernal.
La figura del lago emergió de nuevo, esta vez más cerca y más terrorífica que nunca. Los acechaba con su mirada vacía y su risa perturbadora. Desesperados, intentaron luchar contra ella, pero sus ataques eran inútiles. Uno por uno, los amigos fueron atrapados y arrastrados al lago, desapareciendo en sus oscuras aguas.
Sara fue la última en ser arrastrada por la figura del lago. Se aferró a la linterna de su amigo mientras era sumergida en las profundidades. La risa resonaba en sus oídos mientras perdía la conciencia.
Al día siguiente, los cuerpos de los amigos nunca fueron encontrados. Solo quedaron las tiendas de campaña vacías y la linterna parpadeante.
Al día siguiente, los cuerpos de los amigos nunca fueron encontrados. Solo quedaron las tiendas de campaña vacías y la linterna parpadeante. Los lugareños del pueblo cercano contaron historias de fantasmas en ese lago durante años, y nadie se atrevía a acercarse a ese lugar maldito.
Pasaron años antes de que un grupo de investigadores se aventurara a explorar el lago. Lo que encontraron los horrorizó. Los huesos de los amigos estaban dispersos por el fondo del lago, junto con otros restos humanos de personas desaparecidas en años anteriores.
Se decía que el lago estaba embrujado por un espíritu vengativo que buscaba víctimas para arrastrarlas a las profundidades y alimentarse de ellas. La linterna encontrada junto a los restos emitía una luz intermitente, como si el espíritu de Sara estuviera tratando de enviar un mensaje desde más allá de la tumba.
Desde entonces, el lago fue evitado por completo, y se convirtió en un lugar de leyendas macabras y terroríficas. Se dice que aún se escuchan risas siniestras y susurros en las noches oscuras, y nadie se atreve a acercarse a ese lugar, temeroso de ser la próxima víctima del espíritu vengativo del lago.
0 Comentarios